La cara de bobo de Romeo al ver a Julieta debía ser de tal calibre que ella supo lo que estaba pasando nada más echarle el ojo. Lo mejor, que ella sintió lo mismo pero como era más fina y delicada, sólo sonrió.
Y aún ahora, con la tecnología punta en nuestras manos, miles de estímulos a nuestro alrededor y con una libertad sexual sin precedentes, una frase como esta nos sigue poniendo los pelos de punta. La energía nos mueve el corazón y cuando dos energías gemelas se encuentran, saltan chispas.
Ojalá todo el mundo pudiera sentir algo así una vez en la vida, al menos….
Sí, esto es amor…