Seamos sinceros, a todos nos gusta ser originales. Y a la vez hay muebles que triunfan, que tiene todo el mundo y que vayas a la casa que vayas te hacen decir ” anda, yo también lo tengo!” Aplicable a sillas, estanterías, mesas… y baúles. Pues bien, hoy en El Tarro de Ideas te vamos a enseñar cómo originalizar una de esas piezas “best seller” que todo el mundo tiene y conoce.
Nota a los perezosos: este Tarro-Tutorial tiene sólo dos pasos. Sí, sí, has leído bien, DOS! Así que… no hay pereza! 🙂
Apunta, vas a necesitar: esmalte al agua satinado ALP de color negro, una brocha, unos números metálicos y un destornillador. Bueno, y un baúl, claro!
Lo primero, y casi último que vamos a hacer es cambiar el color a nuestro baúl. En El Tarro hemos elegido el color negro, porque a elegante no le gana nadie y porque va a contrastar muy bien con la deco que le vamos a poner en el siguiente y último paso.
Pues lo dicho, ponte música, coge la brocha y a pintar!
Cuida de cubrir todos los recovecos. O no! Puedes también jugar con el color natural de tu baúl y la pintura.
Nuestro baúl tarrero va a ir vestido con un look total black, así que vamos a pintarle los zapatitos de negro también.
Cuando esté bien sequito, vamos a añadirle una numeración chula. En nuestro caso hemos optado por unos números plateados, porque había que decidirse por algo, pero.. ¿y lo bien que le quedarían también en dorado?
Si prefieres darle un toque más colorido, puedes pintarlos con el tono que te ronde la cabecita. Todo depende también del entorno en el que vayas a ubicar el baúl. En este caso, en el jardín tarrero que va a ocupar, el negro quedaba perfect. ¿No te parece?
Utilízalo como mueble de almacenaje y… como mesa auxiliar!
¿Y a ti, qué se te ha ocurrido para personalizar el tuyo?
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