Ya, ya, sabemos que no es viernes, pero las ganas de que llegue nos ha podido!
Si siempre has querido tener una pizarra pero nunca has sabido dónde ponerla…has llegado al post adecuado. De la mano de pinturas Alp, te vamos a enseñar a convertir un simple armario en todo un señor encerado. Corre, ve a comprar las tizas porque te va a encantar!
Tan sólo necesitas: Pintura efecto pizarra de Alp, un rodillo con su cubeta, el armario que quieras tunear y los complementos que quieras introducirle.
Lo primero que vamos a hacer, para que te sientas más seguro pintando, es bordear con un poco de cinta adhesiva la zona que vamos a pintar
Asegúrate de pegar bien todo el borde para que no pase la pintura. Y ¡pinta! 🙂
Mientras dejas secar el primer compartimento para darle una segunda capa, según las indicaciones que puedes encontrar en el bote de pintura, vete adelantando trabajo pintando el segundo armario.
Una vez secas todas las capas que hayamos dado, retiramos la cinta adhesiva, que no queda muy decorativa ella.
Ahora vamos a fijar las barras que sujetarán nuestros portatizas. Con ayuda de un lápiz y una regla marca dónde atornillar de manera que quede recta.
Atornilla los soportes y asegura la barra. Sigue las instrucciones del fabricante, porque puede que no hayas elegido la misma que nosotros en El Tarro.
Cuelga con ayuda de unos ganchos los cubitos porta material y ¡ya tenemos un armario pizarra genial apto para todos los públicos!
Para los dibujines o los deberes de los más peques o para nuestras frases tarreras motivadoras a tope de power!
¿Para qué vas a usar tú tu armario pizarroso?