¿No os pasa que a veces una sola imagen, una sola, os atrapa porque os acaba de transmitir un nosequé que hace que te asalten los recuerdos de la infancia, momentos felices de la vida, o simplemente os hace sentir bien?

Pues eso es lo que me pasó a mí con Elena Shumilova, una fotógrafa increíble que tiene como fuente de inspiración lo mejor de la vida, las cosas cotidianas, sencillas, sus niños, Yaroslav y Vanya, su entorno, sus queridos animales con los que conviven en las afueras de Andreapol en Rusia, haciendo que vivas con sus fotos todos los momentos mágicos que refleja con su Canon a diario.

Los fenómenos naturales y el cambio de estaciones parecen ser los mayores estímulos en sus obras. ” Cuando disparo mi cámara yo prefiero usar la luz natural – tanto dentro como fuera . Me encanta todo tipo de condiciones de luz – luces de calle, luz de las velas , la niebla, el humo , la lluvia y la nieve.

Hace frío fuera, así que coge entre tus manos el cafetín o el té que te estás tomando y disfruta de las evocadoras imágenes de amistad entre los niños y los animales. Feliz miércoles tarreros!